Los veo hablando de liderazgos anticuados de los que no se utilizan en ninguna estructura que actualmente de resultados. Deberían ser las estrategias y planes con buenos equipos y liderazgos compartidos los que dirijan los debates. El estás conmigo o contra mí es un tipo de liderazgo que no nos sacara del agujero.
Seguimos buscando en el leader al salvador de la patria; al mentor paternalista. Quizás sea herencia de siglos donde el leader era el rey y el consejero el confesor. Así no salimos de esta, y lo peor es que no lo pillan. Supongo que es más fácil para nosotros porque nos hace más fácil echar la culpa al otro. Y a ellos les encanta sentir que “ellos” pueden solucionarlo.
El problema de falta de competitividad de España es esta visión del “torero nace”, donde el debate se considera debilidad e vez de elemento generador de soluciones Cuando la selección nacional gano el mundial, y un periodista decía, “!cómo jugáis, sois unos ases!”, el futbolista contestaba “no, es el trabajo en equipo, el esfuerzo”, el periodista repetía “si, si, pero es que tenéis más talento que ninguna generación de futbolistas”. Lo que tenían no es más talento, sino que han sido la primera generación que dejo de quejarse del árbitro y seguían jugando aun con las cosas en contra.
La falta de confianza en el trabajo en equipo, y la deslegitimación de la crítica interna como fuente de crecimiento son las principales fuentes de la corrupción. Porque cuando el leader cree que él tiene la solución, y que en él está el poder de cambiar, empieza a creer que puede hacer lo que quiere, porque es el bien del otro. Al eliminar la crítica se venda los ojos y deja de ver cualquier realidad.
Este sistema nos lleva a que la única forma de avanzar sea a tropezones. Es decir, cuando el leader se queda sin impulso, su “corte”, que no equipo, se desmorona, o vende el cadáver. Ahí empieza un baile de mascaras e intereses que deja de lado la estrategia, los objetivos, los planes, para buscar al “macho alfa”. Cuando se encuentra otro (de cualquiera de los partidos) empieza otro proceso de cambio. Una aceleración que trae algo de progreso, hasta el siguiente tropezón.
Este proceso, no permite un crecimiento planificado, objetivo, ni deja espacio para al evaluación es decir, no se puede aprender. Los partidos políticos mayoritarios no son sino el reflejo de la sociedad que les rodea, y viceversa.
En Ferraz buscando leader e vez de visión y misión y evitando “debatir”.
Vamos que siguen sin hacer democracia y se dedican a hacer politiqueo de pasillo. Y lo que es peor, no hacen lo que cualquier institución con dos dedos de frente haría; mirara a largo plazo.. porque el corto plazo no lo arreglan con parches.
Siguen sin pillarlo!
